La última película sobre el universo Star Trek no es de ciencia ficción. Es un drama salpicado de situaciones cómicas, donde una joven con síndrome de Asperger escribe un guión sobre Star Trek para presentarlo a un concurso. Si gana, demostrará a su hermana que su situación ha mejorado, que sabe cuidar de sí misma, y por fin podrá conocer a su sobrino.
Wendy, la protagonista, tiene 21 años, y tras la muerte de su madre vive en un centro especial para autistas, donde varias monitoras los ayudan para que puedan integrarse en el mundo real, con un trabajo adecuado y una rutina personalizada. Interpretada magistralmente por Dakota Fanning, llegas a creer que realmente padece ese trastorno.
El resto de personajes brillan en momentos concretos, destacando el perro Pete y un policía trekkie interpretado por Patton Oswalt.
La dirección de Ben Lewin es correcta, no arriesga, comete algún fallo que otro, pero deja con un buen sabor de boca. Es una película sin muchas pretensiones, que sirve para normalizar un poco más el autismo. Aunque peque de buenrollista en muchos momentos, hay otros muy duros.
El título en castellano hace referencia a una de las frases más conocidas de Star Trek, supongo que para atraer al público trekkie. En cambio, el título original viene de uno de los momentos de la rutina diaria de Wendy: esperar cuando el semáforo está en rojo.
La cinta se disfruta aunque no conozcas nada de Star Trek, pero si eres fan podrás disfrutar de todos los guiños a esa mítica serie.
Estreno en España: 1 de marzo.
Wendy, la protagonista, tiene 21 años, y tras la muerte de su madre vive en un centro especial para autistas, donde varias monitoras los ayudan para que puedan integrarse en el mundo real, con un trabajo adecuado y una rutina personalizada. Interpretada magistralmente por Dakota Fanning, llegas a creer que realmente padece ese trastorno.
El resto de personajes brillan en momentos concretos, destacando el perro Pete y un policía trekkie interpretado por Patton Oswalt.
La dirección de Ben Lewin es correcta, no arriesga, comete algún fallo que otro, pero deja con un buen sabor de boca. Es una película sin muchas pretensiones, que sirve para normalizar un poco más el autismo. Aunque peque de buenrollista en muchos momentos, hay otros muy duros.
El título en castellano hace referencia a una de las frases más conocidas de Star Trek, supongo que para atraer al público trekkie. En cambio, el título original viene de uno de los momentos de la rutina diaria de Wendy: esperar cuando el semáforo está en rojo.
La cinta se disfruta aunque no conozcas nada de Star Trek, pero si eres fan podrás disfrutar de todos los guiños a esa mítica serie.
Estreno en España: 1 de marzo.