Bruno y Malik son dos amigos que viven en un mundo diferente: el de los niños y adolescentes autistas. A cargo de dos organizaciones sin ánimo de lucro, forman a jóvenes para que sean cuidadores de casos extremos, además de tener varias casas de acogida. El problema llega cuando las administraciones públicas deciden hacer una inspección, ya que la organización de Bruno no tiene ninguna autorización para el trabajo que realiza.
Olivier Nakache y Eric Toledano ("C'est la vie", "Aquellos días felices") dirigen esta cinta basada en hechos reales, ganadora del premio del público en el Festival de San Sebastián. La historia tiene pasajes tristes, otros alegres, pero sobre todo muy educativos, ya que nos cuenta la realidad del autismo y cómo se ve de puertas afuera. Podemos empatizar con estas personas y con sus familiares. También cuenta con escenas cómicas, para descargar la tensión general de la película. Buen trabajo de los directores.
Reda Kateb ("La résistance de l'air", "Django") y Vincent Cassel ("Cisne negro", "La bella y la bestia") clavan sus papeles, transmitiendo empatía al espectador. Sus personajes están bien definidos y son muy interesantes, sin existir rivalidad entre ambos. El resto de casting cumple sobradamente con sus papeles, sobre todo en el caso de los niños.
A todo esto se suma una correcta banda sonora, una buena fotografía y un gran trabajo de documentación.
El único pero que puedo ponerle es que no es una historia para todos los públicos. Hay momentos muy duros y, al tratarse de historias reales, puede echar para atrás a muchos espectadores que busquen algo más divertido como es "Campeones". Vale la pena sufrir un poco para disfrutar de la película, además de conocer un poco mejor el mundo de las asociaciones de ayuda a personas autistas.
Estreno en España: 28 de febrero.