LA VIDA SIN TI (À PROPOS DE JOAN) | Vaivenes a la caza del recuerdo y del olvido

Quizá algunos recuerdos debieran ser borrados de nuestra mente. En cierto modo, nos liberarían. Pero no harían de nosotros quienes somos a día de hoy. Y es que Joan Verre (Isabelle Huppert), editora en París, alberga unos cuantos secretos que preferiría olvidar, pero gracias a un encontronazo con Doug, el irlandés canalla que fue su primer amor, reactiva más que nunca todos sus recuerdos más dolorosos. 

À propos de Joan, la tercera cinta del director y guionista Laurente Larivière se estrenará este viernes en nuestro país bajo el título de La vida sin ti, donde Joan nos dejará descubrir su vida a través de vaivenes entre el presente y el pasado. 

UN AMOR PELIGROSO Y ARDIENTE

Joan Verre (Freya Mavor) es hija de francesa e irlandés. Tiempo atrás, en un viaje a la isla esmeralda, conoce a Doug (Eanna Hardwicke) un atractivo carterista, en mitad de uno de sus hurtos. Ella observa la escena a conciencia y él, provocado por la mirada de Joan, intenta realizar otro robo más ante sus ojos. Esta desvergüenza atrapa a la francesa, atraída por el peligro y por la emoción que le brinda el irlandés, y juntos comienzan una relación que ves con claridad cómo va a desarrollarse. 


Treinta años después, Joan y Doug se encuentran en París. Él ha venido a visitar a un familiar y se topa con Joan, con quien termina tomándose un café y rogándole un abrazo, tras ponerse al día acerca de sus vidas. Sin embargo, Joan sale de la cafetería llevándose consigo una información que le quema en la punta de la lengua pero que, una vez más, se guarda en el bolsillo. 

MATERNIDADES COMPLEJAS

De nuevo en el pasado, tras regresar a Irlanda y contarle a Doug que iba a ser padre, le descubre en el peor momento y se refugia de nuevo en sí misma y en su familia. Sabe que jamás volverá a Irlanda. Una vez establecida en París, regresa a la casa de sus padres con Nathan (su bebé) y más tarde comienza a trabajar como editora en una firma importante. 

Sin embargo, su maternidad no es la única relevante: la relación con su madre es, en cierta manera, tormentosa. Es una persona impulsiva y hedonista, que no dejará escapar la oportunidad de disfrutar y que no tendrá reparo en cumplir sus deseos a cualquier coste. Aunque Joan considere que su madre y ella son muy distintas, en el fondo siempre están movidas por los secretos que esconden tras su corazón. 

UNA SENDA CON MUCHOS CAMINOS

Las idas y venidas entre presente y pasado son frecuentes en esta cinta, donde Isabelle Huppert brilla sobre todo el elenco, y donde se constata por encima de todo que, a pesar de todas las adversidades que sufre Joan sigue adelante con aparente firmeza, a pesar de todo. 

Sin embargo, y aunque gran parte de los planteamientos se resuelven, siento que el director (también guionista en la cinta) quiere tener muchos frentes abiertos que termina abandonando o descuidando. El final tiene un giro sorprendente del que, personalmente, estuve bastante decepcionada. Para mí lo más valioso de la cinta es cómo descubres todas las capas de Joan y cómo te deja adentrarte en una vida tan interesante y llena de altibajos como la suya. 

La fotografía tan bucólica, que te aleja del bullicio del trabajo de Joan, hace que que conectes con esa serenidad que ella tanto ansía, a pesar de que sabes que dentro de su cabeza no hay jamás una paz, que es visible y que ese encontronazo es lo que ha reactivado aquello que debe aceptar de una vez por todas. 


Publicar un comentario

Artículo Anterior Artículo Siguiente